Suscríbete y recibe el mensaje de tus ángeles y contenido especial

¿Dónde estaban mis ángeles en momentos difíciles?

Seguramente al igual que yo te has preguntado dónde estaban tus ángeles en esos momentos difíciles de cambio e inestabilidad. ¿Por qué no te ayudan o te ayudaron?

Aquí la respuesta:

“Aquí mismo, a tu lado, sosteniéndote, tratando de guiarte; sucede que actuamos hasta donde tu libre albedrío nos permite.¿Acaso creíste que te hemos abandonado? Sólo fuimos por esos amigos que te sostuvieron cuando creíste que no podías más, también estuvimos cuando te separaste de esa pareja, pero no te percataste que no sufriste una “pérdida” y que poner límites fuertes, claros y amorosos era en tu mayor beneficio; que aprender a ver por tí y para tí era prioridad.

Cuando creíste perder ese trabajo, que sólo te llevo a salir de tu zona de confort y ahora te propone hacer lo que te hace más feliz, en lugar de lo que se supone deberías hacer.

Mientras aprendías de amor incondicional y discutías con tus hijos, hermanos, pareja; pues a pesar de esto (y aunque no lo creas) sólo te gritan desesperadamente cuando te aman y te extrañan.

En esa “enfermedad” que te aterró pero que te hizo valorar tu tiempo y enfocarte en lo que te hace feliz, solo aprendías a distinguir lo importante de lo que no lo es. Estuvimos en esos momentos y algunos otros mas donde creíste perder el rumbo, el control, donde te sentiste solo (a) . Si te encuentras justo en ese momento de reestructura, no te preocupes de deshacerte y renacer, o de perder una pieza o todas en el proceso.

Vuelve atrás… a todas esas situaciones de “perdida”, “fracaso”, “soledad”, “enfermedad”, donde estuvimos contigo; y observa como renaciste de cada una de ellas, observa que siempre hubo una bendición escondida, observa como la obscuridad es luz a la distancia.

Observa como siempre estuvimos ahí, llevándote a ese lugar donde serías más feliz. Sigue caminando, al tiempo verás que sólo era cuestión de confiar y recordar quién camina a tu lado.

Si no es ahora, ¿cuándo? ¡Sigue adelante!

Gracias a Arcánguel Miguel y Jofiel por haber guiado este escrito. 

 

 



Te podría interesar: